La modificación del planeamiento urbanístico de la antigua parcela del Colegio Peleteiro, en el Ensanche de Santiago, para la que el Gobierno local ha alcanzado un acuerdo con la Sareb, contempla unos 16.000 metros cuadrados para uso residencial, además de 400 plazas de aparcamiento y comercio en la planta baja.
Así lo han detallado este jueves en rueda de prensa la alcaldesa, Goretti Sanmartín, y el concejal de Urbanismo, Iago Lestegás, destacando la posibilidad de contar con «unha cantidade importante de vivenda protexida no solo urbano no centro da cidade». Tal y como avanzó este miércoles Lestegás, al menos el 45% de las viviendas serán de protección oficial.
Un acuerdo entre Concello y Sareb
Sanmartín recordó que hace año y medio mantuvieron una reunión con el ministro de Economía, Carlos Cuerpo, para tratar de desbloquear el desarrollo de la parcela del Peleteiro. De ahí surgió un compromiso en el que tanto el Gobierno como el Concello tenían «intereses comúns».
Tras meses de trabajo técnico entre ambas partes, se ha alcanzado esta propuesta que reduce el uso comercial para dar prioridad al residencial. Se mantienen, además, 900 metros cuadrados de equipamiento comunitario para un centro de día, 1.300 metros cuadrados de espacio público y un mínimo de 400 plazas de aparcamiento.
Vivienda protegida en el Ensanche
«Ter a oportunidade de facer vivenda protexida é un elemento que queremos destacar», subrayó Sanmartín, señalando que la coincidencia de intereses entre Sareb y el Concello es «unha magnífica noticia para o conxunto dos veciños de Santiago».
Esta propuesta se someterá el próximo lunes a la Comisión informativa previa al pleno del jueves, donde se debatirá entre los diferentes grupos municipales.
Comparación con el planeamiento vigente
Por su parte, Lestegás comparó este nuevo planeamiento con la ordenación vigente, que contemplaba un uso mayoritario para comercio, ocio, restauración y hotelero. La nueva propuesta prevé 19.000 metros cuadrados construidos con usos comerciales, de ocio y restauración (sin pubs ni discotecas), además de oficinas de primera categoría y terciario equipamiento en las plantas bajas.
Mientras tanto, en las plantas superiores, el uso mayoritario será residencial, aplicando la ordenanza 1 vigente en el Ensanche: comercio de proximidad en planta baja y vivienda en las alturas.
El edil de Urbanismo reivindicó la introducción de una reserva significativa de vivienda protegida en el Ensanche, calificando la solución como «moi positiva» para unos terrenos que llevan años sin uso y que espera que «moi pronto se poida poñer en marcha».
Aunque todavía no se han definido superficies concretas para cada uso, se estima que habrá unas 160 viviendas, de las cuales al menos el 45% serán protegidas.
Un pleno clave el próximo 27 de febrero
A preguntas de los medios sobre la posición de los grupos municipales, la alcaldesa afirmó que «non cabe agardar» otra cosa que unanimidad en el pleno del 27 de febrero.
«Non se me ocorre pensar que, por responsabilidade, no momento en que nos atopamos, tendo un acordo coa Sareb cunha proposta que responde ás necesidades de Santiago y tamén co que vimos falando con todo o tecido asociativo e veciñal, non haxa unanimidad ao respecto», concluyó Sanmartín.