Fachada de la Casa Cornide

El Concello inicia la recuperación de la Casa Cornide

Los trámites administrativos para la recuperación de la Casa Cornide ya están en marcha. Así lo anunció ayer la alcaldesa, Inés Rey, tras aprobarlo en la Junta de Gobierno Local. De este modo, se inicia el procedimiento de revisión de las decisiones tomadas por el Ayuntamiento en el año 1962, “que permitieron que un edificio público acabara en las manos de la familia Franco tras haber sido usurpado a todos los coruñeses y coruñesas bajo un apariencia de legalidad”, expuso la regidora municipal.

A través de esta iniciativa, el ente municipal busca anular dos decisiones tomadas por el Gobierno de entonces en la ciudad que permitieron que la propiedad terminase en manos de la familia Franco. En especial, la adjudicación en subasta de la Casa Cornide aprobada el 2 de agosto de 1962, mediante la cual el Conde de Fenosa, Pedro Barrié de la Maza, se hizo con la propiedad. Días más tarde, el edificio fue traspasado a Carmen Polo -esposa de Francisco Franco-, por un precio muy inferior. “Nuestros informes jurídicos concluyen que esa transacción no fue legal, porque ni tan siquiera cumplía con los requisitos de las propias leyes entonces vigentes para poder serlo”, explicó la alcaldesa, que indicó que la propuesta será llevada al Pleno para su aprobación.

Alegaciones y reclamaciones a la Xunta por la Casa Cornide

Una vez aprobada por el Pleno, el Concello municipal contará con un plazo de seis meses para resolver esta revisión de oficio. Además, también se abre un plazo de 15 dilas para que las personas interesadas presenten las alegaciones que consideren.

«La Casa Cornide, ese edificio histórico cerrado para los coruñeses desde hace más de medio siglo, tiene que volver a ser de los coruñeses y de las coruñesas, únicos propietarios legítimos de una de nuestras joyas arquitectónicas”, insistió Inés Rey. A su vez, la alcaldesa también informó de que el Ayuntamiento le ha remitido una solicitud escrita a la Xunta de Galicia para reclamar que tome las medidas pertinentes “para que la familia Franco se ajuste a la legalidad y abra la casa al público cómo debe hacer”, dado que la propiedad ostenta la condición de Bien de Interés Cultural (BIC) desde hace un año.

Asimismo, desde María Pita se instará al Ministerio de Educación y al Ministerio de Hacienda a realizar una revisión de oficio de la permuta hecha en aquel momento, que permitió que el edificio pasase de ser una propiedad estatal a tener carácter municipal.