Las obras de reurbanización de San Andrés y su entorno avanzan progresivamente. Hoy jueves, el tramo comprendido entre las calles Sol y Torreiro se ha abierto totalmente al tránsito peatonal. Allí ya es visible el nuevo pavimento de la calzada, en hormigón desactivado, idéntico a lo que se dispondrá en los futuros carriles de circulación rodada en San Andrés.
El concejal del área de Economía y Planificación Urbana, José Manuel Lage, explicó que la reapertura de San Andrés entre Sol y Torreiro “es, por ahora, exclusivamente para el tránsito peatonal”. Esto se debe a que las obras continúan y todavía no es posible habilitar la circulación de vehículos en este enclave. Además, en la propia calle Sol, perpendicular a San Andrés, prosiguen los trabajos de demolición del firme, previos a la renovación del pavimento de la calzada.
Cabe recordar que los trabajos de mejora en la calle Sol van unidos a los que también se están ejecutando entre las calles Pórtico y Torreiro —puntos donde es habitual la presencia de transporte público y vehículos de carga y descarga—. Estas dos actuaciones son complementarias a la reurbanización de San Andrés, a la que el Concello destinó 3,2 millones de euros.
Santa Catalina, en paralelo a Sol y Torreiro
Una vez avanzado en Sol y Torreiro, el Ayuntamiento tiene previsto iniciar mañana los trabajos de relevo de las tarimas de madera existentes en la plaza de la fuente de Santa Catalina.
Actualmente, en la plaza hay dos zonas con pavimento de listones de madera, deterioradas por su exposición a las inclemencias meteorológicas. La progresiva erosión de los listones derivó, con el paso del tiempo, en un riesgo para la seguridad de los viandantes, por el índice de resbalones de la superficie en días de lluvia o humedad.
Debido a esto, y atendiendo a las solicitudes de la ciudadanía, el Concello ha decidido retirar el firme de madera, que será sustituido por nuevas piezas de granito, el mismo material de las losetas ya dispuestas actualmente en el entorno de la tarima de madera. Tendrán, eso sí, unas dimensiones diferentes, más estrechas y alargadas, semejantes en su forma a los antiguos listones de madera, tal y como se acordó en la última comisión del PEPRI.
El área de intervención será acotada durante el desarrollo de los trabajos, para reforzar la seguridad de los peatones. El vallado perimetral empezará mañana viernes.